D.O. Costers del Segre
La elevación de la finca (850-1000 metros), en una área de buena exposición solar y envuelta de una importante masa boscosa, juntamente con una vertiente histórica que cuenta con una ermita y antiguos lagares de fermentación de uva escarbados en las rocas por los monjes de la orden hospitalaria (s.XII), hacen que el lugar tenga un entorno privilegiado y mágico.
Los terrenos son en general franco-calcáreos, de bajo contenido en materia orgánica, que junto con la climatología continental, con un alto contraste térmico entre el día y la noche, hace que podamos obtener vinos de una altísima calidad.
La vendimia se hace manualmente y en pequeñas cajas de 10kg con uvas procedentes exclusivamente de la finca. El vino está fermentado en diferentes materiales: tinas de madera y de acero inoxidable y lagares de piedra naturales. Gracias a estos tres materiales obtenemos vinos con tonos y matices muy diferentes y con una gran complejidad aromática.
La finca cuenta con un importante número de lagares de fermentación esculpido a la piedra que funcionan por gravedad y que después de unas pruebas iniciales estamos reutilitzando para fermentar una importante parte de nuestros vinos. Debido a nuestro convencimiento en relación con el medio ambiente no utilizamos ningún herbicida, insecticida ni fungicida, a excepción de aquellos permitidos en la agricultura orgánica.
Buena y atractiva nariz cargada de frutas rojas y violetas. Maderas nobles elegantes y presencia suave de especias.
En boca presenta una muy buena acidez que transmite una sensación fresca. La primera impresión es muy agradable, de trago goloso que invita rápidamente a un segundo sorbo. Sedoso y agradable. Limpio. Persistencia larga.
Magnífico vino que me ha sorprendido mucho!
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